En una oportunidad, una mujer y un hombre se miraron a los ojos a través de una pantalla. Hasta ese momento, eran dos completos extraños. Pero a partir de aquella conexión digital, ambos se volvieron inseparables: el amor unió sus vidas.
Dos ciudadanos italianos, que se vieron por primera vez mediante una videollamada laboral, terminaron convirtiéndose en una famosa pareja en las redes. La historia de ellos, quienes se llevan 31 años de diferencia, atrae la atención de millones de usuarios.
Veronica, de 23 años, reside en su país junto a su novio Samuele, de 54. La pareja se desempeña de manera laboral en el mismo ámbito: la comunicación digital. De hecho, según una entrevista del portal de noticias What’s The Jam publicada en enero, se conocieron hace menos de dos años mientras trabajaban a la distancia.
Así se conocieron los italianos
Un día, por esa época, Veronica y Samuele coincidieron en una videollamada por cuestiones laborales. «Esta videoconferencia, inicialmente formal, pronto se transformó en algo más. No era solamente un diálogo profesional que fluía sin esfuerzo: había una conexión especial, un entendimiento natural que nunca habíamos experimentado«, manifestó la joven al mismo medio.
En ese entonces, el hombre estaba divorciado ―no tiene hijos― y dispuesto a hallar de nuevo el amor. Ella, por su parte, también se encontraba soltera.

Luego del acercamiento inicial entre ambos ―acercamiento simbólico porque fue a la distancia―, Veronica y Samuele se transformaron en colegas: empezaron a formar parte de varios proyectos de trabajo en conjunto.
«Estar juntos en varios proyectos nos acercó cada vez más. Hablábamos durante horas, descubriendo gustos en común, formas de pensar similares y una visión de la vida que parecía casi perfectamente alineada. Enseguida nos dimos cuenta de lo profunda que era esta conexión. Era como si tuviéramos las mismas emociones, la misma mente«, aclaró la joven.
A pesar de la sólida unión virtual, faltaba algo fundamental: el encuentro en persona, cara a cara. El problema para ellos era que vivían en distintas ciudades, separadas por varios kilómetros de distancia. Pero un día se reunieron.

«La curiosidad y el deseo de conocernos en persona resultaban demasiado fuertes como para ignorarlos. Cuando nos vimos en persona por primera vez, descubrimos que lo que habíamos sentido detrás de una pantalla no era sólo imaginación. La conexión física era tan poderosa como la mental y espiritual. Era amor, puro y simple, originado sin ninguna presión«, dijo Veronica.
Después de la primera cita, los italianos se guiaron por sus sentimientos y apostaron a formar una pareja. Al cabo de un tiempo, se mudaron a una casa y comenzaron a convivir. Desde entonces, siguen juntos. Sin embargo, no todo fue color de rosas para ambos.
El impacto de la relación en su familia: discusiones y noches de lágrimas
Al principio, la familia de la joven quedó impactada al haberse enterado de la diferencia de edad con su novio. En particular, el papá y la mamá de Veronica, que tiene 51 años.

«Mis papás fueron quizá el mayor desafío. Al principio ellos estaban sorprendidos e incrédulos. No podían entender cómo yo, tan joven, podía enamorarme de un hombre mucho más grande y con experiencias diferentes a la mía. Hubo discusiones acaloradas, noches de silencio y lágrimas. Como suele ocurrir en estos casos, es normal sentir cierto shock inicial y necesitar tiempo para procesar la situación», reconoció al respecto.
«Ellos (NdR: se refiere a sus papás) investigaron en Internet para entender mejor la dinámica de mi relación e incluso se preguntaron si esta elección mía podría estar ligada a una posible falta de afecto por su parte. También consultaron a psicólogos», agregó la joven.

Con el paso del tiempo, los padres de Veronica fueron aceptando su relación con Samuele. «Ellos nunca trataron de impedir que lo viera. En pocas semanas empezaron a ver las cosas de otra manera, sobre todo después de conocer a Sam. Mis padres notaron los sentimientos genuinos y la profunda conexión que había entre mi novio y yo. Su perspectiva había cambiado. Ahora viajamos juntos, celebramos cenas familiares y compartimos momentos de alegría en familia», expresó la italiana.
La repercusión de la pareja en las redes: opiniones a favor y en contra
Veronica y Samuele crearon una cuenta de TikTok en conjunto y adquirieron popularidad en esta plataforma: en la actualidad, ostentan más de 23 mil seguidores. A diario, comparten fotos y videos ―este contenido obtiene millones de reproducciones― sobre sus aventuras en pareja. «Cuando nuestros vídeos se hicieron virales, nos llegaron todo tipo de comentarios negativos«, reconoció ella.
Las críticas de los internautas eran sobre la diferencia de edad entre ambos. Por ejemplo, escribían en las redes que la joven tenía daddy issues ―un término que hace referencia a presuntos problemas con su papá― o que su novio parecía ser en realidad su abuelo.

«Las miradas, los comentarios y los prejuicios nos acompañaron desde el principio. A los que nos odian siempre les respondemos lo mismo: el amor no puede medirse por las opiniones de los demás. Mucha gente usa las redes para descargar su propia infelicidad y difundir negatividad«, afirmó Veronica.
Su historia de amor también atrajo mensajes positivos por parte de los usuarios. Muchos de ellos, en la misma situación de pareja que los italianos. «Nosotros queríamos ser una apoyo para las parejas que tenían relaciones similares. Todos los días nos llegan mensajes de personas que viven historias como las nuestras. Nos escriben porque ocultan sus relaciones a sus padres o familias y buscan consejos nuestros. Nos dan las gracias por darles fuerzas para mejorar sus relaciones amorosas. Algunos incluso dieron el gran paso de hacer públicas sus relaciones», aseveró.
Por otro lado, la joven dejó en claro que tanto ella como su novio se encuentran satisfechos con el vínculo que formaron. «La vida es un regalo único, un milagro que merece ser vivido con todo el corazón, cada día. Amar la vida significa aceptarla tal como es, sin condiciones, sin expectativas», reflexionó.