“Hoy tenemos al señor Marco”. Con ese anunció y un primer plano del bebé, Vero Lozano inició la emisión de este lunes de Cortá por Lozano en Telefe y enterneció a todos. La visita de Sol Pérez llenó de alegría el estudio y permitió conocer detalles de estas primeras semanas de crianza junto a Guido Mazzoni, su pareja.
“Yo estoy enamorada. Es un gordo pipón y no puede más de lo bueno. Yo siempre le digo a Guido que no sé a quién salió porque nosotros somos un desastre”, contó.

La influencer contó que el pequeño se suele dormir a las 22:30, luego de un baño caliente y que cada tanto tiene las famosas y típicas noches complicadas en donde no logra conciliar el sueño: ”Ayer estaba sacado, pobre. Muy enojado ayer estaba muy enojado y no se quería dormir porque a veces pasa que cuando no duerme siesta se pasa de rosca».
Por lo general, duerme de corrido hasta las seis de la mañana. “Es un montón. Después yo le doy la teta en la cama, así que ni nos levantamos. Antes le cambiábamos pañal y ahora tira para más. Se levantó a las nueve”, exclamó.
El deseo concretado de Sol Pérez y su rutina de entrenamiento post parto
“Yo siempre quise ser mamá. Era como un sueño. A Marco lo recontra deseaba. Entonces para mí es rarísimo, pero para mí el mundo es como que perdió todo interés. Mi interés está puesto en él. Capaz que después cambia. Al principio recontra decía que quería tener otro. Ahora es un montón y yo estoy muy enamorada de él”, afirmó en el ciclo de las tardes del canal de las pelotas.
Cuando le preguntaron cómo fue volver a entrenar contestó que le dije a su pareja “que necesitaba hacer algo porque me iba a dar algo” porque “estaba todo el tiempo amamantando, horrible con pijama y los pelos revolcados”.
“Arranque entrenando en casa. Se lo dije a mi obstetra y e dijo que si me hace bien… que escuche a mi cuerpo. Me dijo que relaje porque no iba a volver al cuerpo que tenía antes de estar embarazada”, comentó.
Y completó: “Después empecé a ir al gimnasio, pero ahora dejé porque estoy empezando a trabajar. Cuando pueda voy a volver”.
Además, se refirió a las críticas que recibió por entrenar: “Obvio que no iba a hacer nada que lastimara al bebé. Pero para algunos era una locura. Adapté la rutina y tenía profes siguiéndome, tal como lo hice ahora después de la cesárea. Hice hasta donde me dolía, pero claro que tenía miedo a abrirme la cicatriz o lo que sea”.