En Argentina, el uso de sistemas de retención infantil es obligatorio hasta los 10 años. Sin embargo, solo el 33,7 % lo utiliza y la mayoría lo hace mal. Un encuentro gratuito reveló los errores más comunes y cómo evitarlos.
En Argentina, solo uno de cada tres menores de edad utiliza una silla de retención infantil al viajar en auto, a pesar de que su uso es obligatorio hasta los 10 años y reduce hasta un 70 % el riesgo de lesiones graves o fatales en caso de siniestros viales.
Así lo revelaron datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, que además alertó que el 85 % de quienes usan estos sistemas lo hacen de forma incorrecta. A este escenario se suma otro dato alarmante: más del 40 % de los accidentes viales ocurren en un radio de 40 cuadras del hogar.
Con el objetivo de revertir esta realidad la Asociación ADISIV realizaron una jornada gratuita del programa “Mamás Seguras”, donde se brindó asesoramiento personalizado sobre la correcta instalación y uso de las sillas infantiles.
Durante el encuentro, se ofrecieron prácticas reales en vehículos, chequeos técnicos y consejos de seguridad. Entre los errores más frecuentes detectados se encontraron:
mala instalación general de la silla
cinturones mal colocados
arneses retorcidos o flojos.
“El uso de la sillita a diario, incluso en trayectos cortos, es indispensable. La mayoría de los siniestros ocurren cerca del hogar. Detectamos muchísimos errores evitables”, explicó Aylen Dell Olio, coordinadora del proyecto.
Además, se reforzaron conceptos clave como:
Utilizar sillas homologadas y en contramarcha hasta los 18 o 22 kilos.
No usar sillas vencidas o involucradas en choques.
Verificar siempre el anclaje, la tensión del cinturón y que no haya contacto con los respaldos delanteros.
La seguridad vial infantil depende de la información, la conciencia y la prevención. Iniciativas como “Mamás Seguras” buscan generar un cambio cultural y salvar vidas, una butaca a la vez.