Los amigos Thomas Dylans Santoro y Maia Romero llevaban una vida normal en Argentina, pero una oferta profesional los sedujo a emigrar a Europa.
Allí, los sucesos no se dieron como esperaban, pero la llegada de un hijo les cambió la vida para siempre.
Hace unos días, esta increíble historia se hizo viral en las redes sociales. En conversación con Clarín, Thomas D. Santoro contó los detalles.
El teatro, el motor de la relación
Thomas Dylans Santoro y Maia Romero se conocieron en la ciudad de Buenos Aires. Thomas dirigía y actuaba en una obra de teatro de la que también participaba Maia.
En la función, Thomas y Maia interpretaban a Noah e Isa, una pareja de novios cuya relación era bastante tensa.
A la par de ello, Thomas hacía rodajes para producciones audiovisuales. Así, conoció a un director que le ofreció convertir, mediante una productora, su obra de teatro en una película, que se filmaría en Cádiz, España.
El joven no lo dudo un segundo: regaló todas las cosas que tenía en Argentina y se preparó para viajar a Europa.
Thomas estaría encargado, al igual que en la función teatral, de la dirección, por lo que creyó correspondiente invitar a Maia para que interprete a Isa, tal como ella lo venía haciendo.
Durante el tiempo compartido, además, los jóvenes habían forjado una relación que terminó en una fuerte amistad.
«La propuse (a Maia) como actriz de la película, y, como era el director, digamos que prácticamente estaba el ok», recordó Thomas a Clarín.
Así entonces, Maia decidió unirse al viaje, motivada no solo por llevar su carrera como actriz a otro nivel, sino también por la experiencia de vivir en otro país. Sin embargo, las cosas no salieron como esperaban.
Una vez en Cádiz, comprobaron que todo lo que les había prometido el director argentino era mentira.
«Un director conocido de Argentina me estafó, hizo cosas bastantes feas. La productora era falsa y la película no se grabó«, contó Thomas.
Pero cuando parecía que todo era desazón, los jóvenes recibirían una noticia que les cambiaría la vida: la llegada de un hijo.
El nacimiento de Noah
Luego de su fallido proyecto en Cádiz, los amigos Thomas Dylans Santoro y Maia Romero decidieron tener un hijo.
En aquel entonces, Maia tenía tan solo 21 años y Thomas 26 y, aunque el bebe fue concebido de forma natural, acordaron que serían padres «amigos».
La noticia de la llegada del niño fue recibida de manera distinta en sus respectivas familias.
En el caso de Maia, su padre se vio sorprendido, ya que ella era muy joven. Sin embargo, con el tiempo, aceptó la situación y le brindó mucho amor a la familia.
Por el lado de Thomas, fue acogida con mucha alegría, debido a que él siempre había querido ser padre y, de hecho, había perdido un bebé con su expareja. A causa de esto, el joven tuvo mucho miedo de que le suceda algo a su amiga o al bebé durante el embarazo.
Mientras tanto, en búsqueda de mejores oportunidades, los jóvenes se mudaron a Madrid, ya que en Cádiz no tenían más nada que hacer.
Finalmente, no hubo problemas en la gestación y, al cabo de nueve meses, nació un bebé varón, que fue llamado Noah, en honor al personaje que interpretaba Thomas en la obra de teatro.
El segundo nombre del niño también tiene que ver con una etapa de la vida de sus padres: Cádiz.
La vida de los amigos «copadres»
Actualmente, Thomas, Maia y Noah viven en una misma casa ubicada en la capital española. Allí se desenvuelve la «copaternidad» de los amigos respecto de su hijo.
El padre es productor, director y creador de contenido para redes, mientras que la madre es community manager.
Por el tipo de trabajo que hacen ambos, es Maia quien suele pasar más tiempo con Noah, aunque Thomas intenta estar siempre presente.
«Desayunamos y almorzamos los tres juntos. En la tarde, suele ser Maia quien se queda con Noah, aunque a veces me lo llevo a mis eventos. A la noche también cenamos en familia», explicó el papá.
Además, al contrario de lo que se puede pensar, la relación de copaternidad con su amiga es muy buena. «Nos entendemos muy bien, nunca hay problemas en relación con el bebé», agregó.
Respecto de cómo Noah interpretará, cuando sea grande, el hecho de tener padres que son amigos, Thomas dijo: «Creo que nos va a amar y va a divertirse mucho con ambos. Con todo muy claro y con la mente más expandidas que nosotros de niños».
Y en cuanto a ellos, contó que en este momento ninguno tiene pareja, pero que tranquilamente podrían tenerla.
Mientras tanto, los amigos siguen trabajando para darle la mejor vida posible a su hijo. Thomas, en particular, ha crecido como influencer en las redes sociales, donde tiene miles de seguidores, y desde allí intenta ayudar a personas con enfermedades y/o en situación de calle.
