Christian Horner dejó su cargo en Red Bull y habló por primera vez tras el impacto. Fórmula 1 en crisis con su salida repentina.
Christian Horner, uno de los nombres más influyentes de la Fórmula 1 en los últimos años, anunció de forma inesperada su salida de Red Bull Racing. La noticia sacudió al paddock en plena temporada, generando incertidumbre sobre el futuro inmediato del equipo austríaco y su rendimiento en la máxima categoría del automovilismo.
La salida que nadie esperaba
El mensaje de Horner fue publicado en redes sociales y medios británicos apenas horas después de confirmarse su desvinculación del equipo con el que ganó múltiples títulos mundiales junto a Sebastian Vettel y más recientemente con Max Verstappen.
«Después de casi dos décadas con Red Bull Racing, decidí dar un paso al costado. Fue una decisión difícil, pero necesaria», expresó Horner, en una breve pero contundente declaración. El exdirector deportivo evitó mencionar las causas puntuales de su renuncia, lo que alimentó aún más las especulaciones.
Un clima interno enrarecido
Desde principios de año, Horner enfrentaba tensiones internas en la escudería. Si bien había sido respaldado por los dueños de Red Bull tras una investigación interna, los rumores sobre disputas con altos directivos y con el entorno de Verstappen no dejaron de crecer.
La presión mediática y la división dentro del equipo habrían sido factores clave para precipitar su alejamiento. Según fuentes cercanas, la relación con Helmut Marko y Jos Verstappen, padre del actual campeón, estaba cada vez más desgastada.
¿Qué pasará con Red Bull?
Con la salida de Horner, Red Bull deberá reorganizar su estructura técnica y de gestión en tiempo récord, justo cuando se aproximan las etapas decisivas del calendario. Aunque aún no se ha confirmado quién tomará las riendas de forma definitiva, se barajan los nombres de Jonathan Wheatley, actual director deportivo, y Pierre Waché, jefe técnico.
Este sacudón llega en un momento sensible para el equipo, que lidera el campeonato de pilotos con Verstappen pero comienza a sentir el acecho de Mercedes y McLaren en la tabla de constructores.
Una era que llega a su fin
Christian Horner se va tras casi 20 años al frente de Red Bull Racing, dejando un legado de nueve campeonatos mundiales y más de 100 victorias en Grandes Premios. Su liderazgo marcó una época dorada para el equipo, que ahora deberá demostrar si puede mantener su hegemonía sin su figura más emblemática.
Su salida no solo impacta en lo deportivo, sino que también reconfigura el mapa político de la Fórmula 1. El futuro de Red Bull, y posiblemente el de Verstappen, dependerá de cómo logren manejar esta inesperada transición.