Se extiende hasta el domingo 21, con más de 30 espectáculos en distintos espacios culturales, con la intención de acompañar la lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo por la restitución de nietos apropiados. “Esa búsqueda es parte de la historia de nuestro país. Todos nos sentimos comprometidos con ella, y eso es algo que las Abuelas construyeron con amor”, dijo la actriz Eleonora Gottlieb, integrante de la comisión organizadora.

La apertura de la 11° edición de Teatro x la Identidad La Plata se realizó en el Teatro Municipal Coliseo Podestá y se extenderá hasta el domingo en salas independientes, espacios culturales y sitios de memoria de la ciudad. El ciclo, que cada año convoca a artistas locales mantiene como eje la defensa de los derechos humanos y la difusión de la lucha de Abuelas de Plaza de Mayo, con entrada libre y gratuita. En esta edición, además, se rindió homenaje al actor Daniel Fanego, uno de los fundadores y protagonistas de Teatro x la Identidad en Buenos Aires, cuya labor fue fundamental en la primera obra, “A propósito de la duda”, de Patricia Zangaro, estrenada en el año 2000.
La actriz Eleonora Gottlieb, parte de la comisión organizadora en La Plata, remarcó la importancia de ese inicio y el impacto que tuvo: “El primer año que se hizo, las consultas en Abuelas se multiplicaron por siete. Eso muestra la fuerza que tuvo el teatro como herramienta para llegar a los nietos y nietas que todavía no recuperaron su identidad”. Recordó también que, tras aquella experiencia, el ciclo se amplió a nuevas salas, a otras ciudades e incluso llegó a distintos países, demostrando que el arte podía convertirse en un puente directo hacia quienes habían crecido bajo una identidad falseada.
En La Plata, el ciclo se realiza cada septiembre en coincidencia con dos fechas claves para los derechos humanos en la ciudad: la Noche de los Lápices, ocurrida el 16 de septiembre de 1976, cuando la dictadura secuestró a diez estudiantes secundarios platenses y desapareció a seis de ellos, y la segunda desaparición de Jorge Julio López, el 18 de septiembre de 2006, un día antes de que se dictara la sentencia contra el genocida Miguel Etchecolatz.
La actriz también subrayó la continuidad del movimiento y su ligazón con Abuelas: “Las Abuelas ya están muy grandes, pero ellas sembraron sus semillas y hoy son los nietos, los hermanos y hasta los bisnietos quienes sostienen la búsqueda. Para ellas es lindo despedirse sabiendo que la búsqueda va a continuar”. Y agregó: “Este año aparecieron dos nietos, un nieto y una nieta que tenían hermanos que los estaban buscando. Pienso que a los 50 años enterarte que tenés hermanos, primos, sobrinos que te estaban esperando abre una perspectiva de vida hermosa. Esa es una batalla que las Abuelas ya ganaron: la sociedad se emociona y celebra cada restitución”.
Para Gottlieb, sin embargo, todavía hay un camino pendiente: “A veces no se entiende que saber cuál es tu verdadera identidad es un derecho. Mientras siga habiendo personas con identidad cambiada, hay un crimen que se sigue cometiendo. Es una deuda que tenemos como sociedad, al igual que con los militares que no son juzgados o que vuelven a sus casas”.
En diálogo con Cacoldephia, planteó también su preocupación por el contexto actual: “Cuando la realidad es tan avasallante, uno tiende a redoblar esfuerzos. Me cuesta entender cómo este gobierno, que reivindica la dictadura, pudo haber llegado democráticamente al poder. Pero confío en nosotros, en que resistimos y seguimos sembrando conciencia”. Y sumó: “En el Espacio (por la memoria, Ex comisaría 5ta) estamos escribiendo una nueva obra de teatro con motivo de los 50 años de la dictadura, que vamos a estrenar en diciembre. Al revisar textos de la época, diarios y otros materiales, fue escalofriante comprobar que las mismas frases utilizadas por los militares aparecieron en las campañas de quienes hoy nos gobiernan, sin cambiarles ni una coma”.
Además de formar parte de la comisión de Teatro x la Identidad, Gottlieb está a cargo del área cultural en el Espacio para la Memoria ex Comisaría 5ta de La Plata, que fue un centro clandestino de detención ilegal que funcionó entre 1976 y 1978, por donde pasaron alrededor de 250 personas, entre ellas mujeres embarazadas y niños. Hoy el lugar es filial de Abuelas y sitio de memoria, donde semanalmente se realizan actividades con escuelas. “Allí hacemos obras que tratan la dictadura desde una mirada poética pero conmovedora, humanizando esa historia para que los chicos puedan reflexionar sobre democracia y derechos. Es emocionante escuchar sus preguntas y ver cómo los docentes eligen trabajar estas temáticas. Hay gente que resiste desde su lugar y eso también siembra conciencia”, contó.
Este año, el ciclo incluyó más de 30 obras en salas como el Coliseo Podestá, Meridiano V, el Espacio para la Memoria ex Comisaría 5ta y espacios culturales independientes como La Macacha, El Altillo del Sur, La Lechuza y Espacio 44, entre otros. La programación abarca propuestas para adultos, público general e infantiles, con estrenos de la Escuela de Teatro de La Plata y con la participación de grupos locales que año tras año sostienen el movimiento. La clausura será el domingo 21 en la Estación Provincial, con presentaciones musicales, circenses y teatrales pensadas para toda la familia.
Teatro x la Identidad fue distinguido recientemente con el Premio Especial Edición 2024 de los Premios María Guerrero, un reconocimiento al aporte cultural y social de un proyecto que nació en Buenos Aires pero que supo extenderse al país y al mundo. Para Gottlieb, ese reconocimiento tiene un valor profundo: “Saber quién sos es un derecho. Las Abuelas lo entendieron desde el primer momento y por eso convocaron al arte, porque el arte es un puente. Hoy seguimos construyendo ese puente, y mientras quede un nieto o una nieta por encontrar, seguiremos haciendo teatro por la identidad”.
La memoria sube a escena
La apertura de una nueva edición de Teatro x la Identidad La Plata tuvo lugar en el Teatro Municipal Coliseo Podestá, con la presentación de las obras “Ridículum Vitae” y “Willy Bronca”, además de una performance dirigida por Diego Biancotto junto a estudiantes de la Escuela de Teatro de La Plata. La propuesta, que forma parte del movimiento cultural nacido como brazo artístico de Abuelas de Plaza de Mayo, despliega hasta el domingo 21 de septiembre una programación diversa en salas y espacios culturales de la ciudad.

La clausura será ese mismo día, a las 16 horas, en la Estación Provincial, con un encuentro festivo que incluirá las presentaciones de La Cirquesta, el Sindicato Argentino de Boleros y la propuesta infantil “La kombi juegoteca viajera”.
La grilla de este año se organiza en tres categorías: obras para adultos, para todo público e infantiles. Entre las destacadas de esta semana se cuentan “Identidades en la literatura dramática contemporánea”, “El vuelo de las brujas”, “Informe para una academia” (en homenaje al poeta desaparecido Daniel Omar Favero), “Gris de ausencia”, “Puzzle”, “Agonizantes”, “Vertiginosa”, “Cuánto vale una heladera” y “Cuando los animales duerman”, entre muchas otras. También hay propuestas para toda la familia como “La Fabriquita”, “Edén”, “Los carrotos de la ruta”, “Historias húmedas platenses” y “Mudanza”, además de obras infantiles como “Cuentos escondidos” y “La planta de Bartolo”.
Con funciones en espacios como la Escuela de Teatro de La Plata, el Viejo Almacén El Obrero, el Centro Cultural Favero, Radio Futura, La Macacha, La Lechuza, Espacio 44, Casa Hereje y el Espacio para la Memoria (ex comisaría quinta), el festival busca sostener un recorrido que combina arte, política y compromiso social.
Todas las actividades son con entrada libre y gratuita, reafirmando el espíritu de un ciclo que cada año se convierte en un espacio de resistencia, memoria y encuentro colectivo.