Un emprendedor de Bahía Blanca expresó el dolor y la desesperación tras encontrar su comercio bajo el agua. «Vivimos cuatro familias de esto, no sabemos por dónde empezar, pero vamos a dejar todo para volver».
La catástrofe que golpeó a Bahía Blanca dejó a su paso no solo destrucción material, sino también profundas heridas emocionales en quienes perdieron todo. Entre ellos, los dueños de Charo, un comercio que quedó sumergido bajo 1,80 metros de agua tras el temporal.
“Charo es nuestra casa. Nuestra vida. Nuestro motor. Hace casi 10 años apostamos a este proyecto con mucha ilusión y miedo, pero empujándonos para que todo salga bien”, expresaron en un desgarrador mensaje. El impacto de la inundación fue devastador: «Ese viernes lo encontramos así: tapado por el agua».
«No sabemos por dónde empezar»
El negocio, que representa el único sustento para cuatro familias, quedó inutilizado. «Ver tu trabajo, básicamente tu vida, así, es desgarrador», relataron. A pesar del golpe, la voluntad de salir adelante sigue intacta, aunque reconocen que necesitan ayuda urgente: «Vamos a salir adelante, pero necesitamos de su apoyo más que nunca. Por favor, necesitamos levantar nuevamente a Charo».
En medio del caos, también hubo espacio para el agradecimiento «a los amigos, al equipo de trabajo, a la familia y a cada persona que ofreció ayuda». Gracias a los hermanos, que a pesar de haber perdido su casa y quedar con lo puesto, estuvieron allí para sostener. Gracias a los cientos de mensajes de apoyo y solidaridad».
“Bahía quedó destrozada, no dejemos de ayudar”
El comerciante también pidió que la comunidad siga colaborando con aquellos que perdieron sus hogares y seres queridos. «No dejemos de ayudar, por favor. Así como nosotras perdimos nuestra fuente de trabajo, mucha gente perdió todo. Nos necesitan, Bahía quedó destrozada», concluyó.
