Trabajadores, jubilados y vecinos concentraron frente a la sede local del PAMI de General Rodríguez, para denunciar una «crisis catastrófica» en la obra social de los jubilados, marcada por el congelamiento salarial, despidos y el recorte de prestaciones.
La movilización se realizó el miércoles por la mañana, frente a la sede de la Avenida 25 de Mayo al 482, bajo la consigna «Defendamos el PAMI» y expresó el profundo malestar ante las políticas de ajuste implementadas por el gobierno de Javier Milei. Mediante un documento, los trabajadores advirtieron sobre el “deterioro de las condiciones laborales y la reducción de prestaciones” que afectan de manera directa a los afiliados.
El texto subraya que, desde hace más de un año, médicos, técnicos, administrativos y profesionales no reciben recomposición salarial, lo que, sumado al aumento del costo de vida, provoca una pérdida constante de personal capacitado. La política de ajuste ya causó el despido sin causa de más de 550 trabajadores en todo el país, generando sobrecarga de tareas y un escenario crítico.
“Desde hace más de un año, los trabajadores no reciben recomposición salarial, mientras enfrentan una sobrecarga de tareas, falta de recursos y una política de ajuste que ya provocó el despido sin causa de más de 550 trabajadores en todo el país», resalta el documento.
Los manifestantes remarcaron que las consecuencias del ajuste recaen directamente sobre los afiliados, con la limitación de prestaciones médicas, estudios, laboratorios e interconsultas, lo que se traduce en mayores demoras y trámites más complejos.
Entre las denuncias más graves se encuentran suspensiones en la entrega de medicamentos gratuitos y tratamientos específicos, demoras de semanas en las autorizaciones, trámites extensos y confusos para la distribución de pañales y ayudas económicas y suspensión de programas de internación domiciliaria y asistencia social, afectando a los afiliados más vulnerables.
Las y los trabajadores afirmaron que «el PAMI es un derecho conquistado con años de aportes y trabajo. Sin trabajadores no hay PAMI, y sin PAMI no hay salud», y alertaron que este proceso de deterioro está vaciando el sistema desde adentro, poniendo en riesgo un servicio público esencial.
Para revertir la situación, los trabajadores del PAMI exigieron una serie de medidas urgentes: restablecimiento de todas las prestaciones suspendidas o limitadas, reincorporación inmediata de los trabajadores despedidos sin causa, recomposición salarial urgente, mejores condiciones laborales y una atención digna y humana para cada afiliado.





