Cincos personas, entre ellos una niña de cuatro años, fueron encontradas muertas la tarde de este martes en una casa familiar ubicada en el barrio porteño de Villa Devoto, tras un llamado al 911.
Luego de ser alertadas, las autoridades de la Policía de la Ciudad, Bomberos y el SAME se desplazaron hasta el lugar. Al llegar, descubrieron los cuerpos sin vida de cuatro mayores -dos mujeres y dos hombres- y una menor, hija de dos de los fallecidos.
Asimismo, encontraron a un bebé de dos años y nueve meses que fue derivado con vida al Hospital Zubizarreta. Fuentes de Metrogas confirmaron a La Nación que las cinco víctimas fatales fallecieron como consecuencia de la inhalación de monóxido de carbono.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Demetrio de Nastchokine, de 79 años, su esposa Graciela Leonor Just, de 73; uno de sus hijos, Andrés de Nastchokine, de 43 años y su pareja -de nacionalidad francesa- de 42, y su hija, Elisa, de cuatro años. Según pudo saber La Nación, los cuatro más jóvenes residían en Italia y habían llegado al país de vacaciones para que los abuelos pudieran conocer al bebé de 2 años y 9 meses, único sobreviviente de la tragedia.
“Lamentablemente, tras alertar el 911, concurrimos con varias ambulancias, se decía que era un escape de gas. Después, los bomberos nos dijeron que era una zona segura y entramos. Constatamos el fallecimiento de un señor de 75 años, una señora de 79, un joven de 43, una joven de 42, una chiquita de cuatro y sacamos vivo al bebé de tres años que está en el Hospital Zubizarreta. Está reaccionando”, sostuvo el titular del SAME, Alberto Crescenti, a LN+. Horas más tarde, señaló que el menor fue derivado al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, en el barrio de Recoleta, donde se encuentra fuera de peligro.
Y detalló: “Creo, por mi experiencia y por la forma en que encontré los cuerpo de que es monóxido de carbono. Mala combustión. Vamos a esperar riesgos especiales. Calculamos que, de acuerdo al estado de la gente, ocurrió hace cinco o seis horas”.
Asimismo, en diálogo con los medios, Crescenti confirmó que los dueños de la casa son los adultos mayores. El matrimonio, junto a los menores, había viajado desde Italia para visitarlos en Buenos Aires. “Los familiares están con los equipos de factores humanos y psicólogos del SAME”, añadió.
El jefe del operativo de Bomberos dijo a LN+ que el matrimonio joven y una menor se encontraban en un dormitorio, mientras que el matrimonio adulto fue encontrado en el piso superior de la vivienda.
Foto: La Nación/GDA.
De acuerdo a lo que precisó el Ministerio de Seguridad de la ciudad de Buenos Aires a La Nación, la vivienda se encontraba con las puertas abiertas por un familiar que al llegar a la casa observó la situación y se descompensó. En ese contexto, una vecina procedió a llamar al 911. Los bomberos retiraron al bebé y ventilaron los ambientes para que personal médico certificara el deceso de las demás victimas.
Según relataron algunos vecinos a La Nación, hace un par de años, en esa casa hubo un incendio, específicamente en la cochera. Indicaron, a la vez, que el fuego comenzó por un problema eléctrico del auto.
Entre los residentes de la zona, había bastante hermetismo. De hecho, preferían no identificarse por respeto al dolor de los familiares de las víctimas. “El barrio es muy tranquilo, muy residencial, la mayoría nos conocemos todos. Estamos conmocionados por todo esto, es una tragedia enorme”, describieron.
Intoxicados con monóxido de carbono
Según pudo saber La Nación, el hecho se trató de un desperfecto en el calefón que produjo un escape y provocó que la familia, que estaba durmiendo, muriera como consecuencia de la inhalación de monóxido de carbono. Las ventanas de la casa estaban cerradas, impidiendo que, ante un desperfecto como este, el monóxido se disipara. Personal de investigación fue al domicilio a realizar los peritajes correspondientes.
Cabe recordar que más del 90% de los accidentes por monóxidos son provocados por el mal funcionamiento del calefón o por obstrucciones en el conducto de ventilación de los mismos.
Metrogas indicó que, en junio 2025, debieron intervenir en 15 casos denunciados, en los que 39 personas resultaron intoxicadas y dos, muertas. En comparación con el mismo mes de 2024 intervinieron en 5 lugares, con 13 personas intoxicadas y una persona fallecida.
Uno de los bomberos que participó del operativo explicó que el monóxido no tiene olor, por lo que el personal del SAME fue muy prudente y accionó de forma correcta al observar dos personas desmayadas o inconscientes: “Se retiró y pidió inmediatamente al personal de bomberos, porque nosotros tenemos el equipo adecuado”, subrayó.
“Con equipo respiratorio se puede ingresar, porque no saben si la atmosfera es carente de oxigeno o tóxica. Es fundamental porque lo que hizo SAME lo tienen que hacer ustedes. Si ven una situación similar no ingresen, pueden ser una víctima más», cerró.
La palabra de vecinos de las víctimas
«Conocía al hijo. Me dijeron que venga para acá. Soy compañero de hockey de Sergio [otro de los hijos del matrimonio mayor]. Sergio está acá, es compañero, un amigo, tiene 40 y pico. Perdió a los sobrinos», expresó a la prensa un conocido de la familia que se acercó hasta el lugar.
Andrea, una vecina del matrimonio, contó que la noticia la tomó por sorpresa al llegar a su casa: “Venía de trabajar del centro y no me dejaban pasar a la cochera. Me dijeron lo que pasó y me quedé dura. Devoto es una zona bastante cuidada y me parece extraño que pueda suceder algo así. Te quedas medio perpleja», afirmó.
Al mismo tiempo, completó: “Los conozco de vista. En Devoto nos conocemos todos. Es un barrio tranquilo y cosas así nunca pasaron. Por eso la conmoción. Horrible. Todos estos, salvo los de los edificios, nos conocemos”.
Foto: Archivo de El País.
¿Qué es el monóxido de carbono?
El monóxido de carbono es llamado «el asesino silencioso» por tratarse de un gas altamente tóxico que no se puede percibir una vez que está en el ambiente: no tiene olor, no tiene color y no es irritante.
Tras ingresar al cuerpo, este gas impide que el oxigeno llegue a los tejidos y a los órganos. Es por esto que una intoxicación por monóxido de carbono puede ser letal.
En los hogares hay varias fuentes de calor que pueden generar monóxido de carbono, como son las estufas a gas o a leña, los calefones a gas, los caños de escape o los braseros.
Los síntomas de una intoxicación por monóxido de carbono pueden confundirse y asociarse a otras enfermedades o patologías, ya que produce nauseas, vómitos, malestar digestivo, cefalea o dolor de cabeza y mareos. En los casos más graves la persona sentirá debilidad muscular, sobre todo en las piernas, perdida de conocimiento, convulsiones y podría llegar a quedar en coma.
El pasado jueves, la Unidad Académica de Toxicología del Hospital de Clínicas advirtió un incremento de los casos de intoxicación por monóxido de carbono en Uruguay. En lo que va de 2025 ya se registraron 50 casos severos y estiman que fallecieron al menos seis personas por intoxicación con monóxido de carbono, lo que preocupa a los expertos en la medida en que el invierno apenas está comenzando.
Consejos del Hospital de Clínicas para prevenir una intoxicación
- Ventilar todos los ambientes de la vivienda al menos una vez al día, incluso en los días fríos.
- Revisar periódicamente estufas, calefones, calderas y chimeneas por personal especializado.
- No utilizar hornallas ni hornos a gas para calefaccionar los ambientes.
- Los calefones a gas deben ser instalados fuera del hogar.
- Se debe evitar el uso de braseros o estufas a leña en lugares cerrados sin ventilación.
- No dejar encendidos artefactos de combustión durante la noche o mientras se duerme.
- Ante cualquier sospecha de intoxicación, ventilar inmediatamente el ambiente, apagar los artefactos, evacuar el hogar y consultar de urgencia al médico.
Con información de La Nación/GDA
