Tras el empate en la elección de las autoridades que hizo naufragar la constitución y puesta en funcionamiento de la comisión investigadora $LIBRA, la oposición intentará reactivarla aprobando a su presidente directamente en una sesión. Para eso buscan un candidato de centro que genere el consenso y los votos necesarios. El oficialismo se prepara para obstruirlo con argumentos técnicos y reglamentarios.
Como contó Clarín, la integración de la comisión quedó empardada entre los 14 oficialistas y sus aliados ( LLA, PRO, MID, UCR, «radicales peluca» y federales de los gobernadores) y 14 opositores (Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, Coalición Cívica y la Izquierda).

Eso hizo que el miércoles, cuando se reunieron, no pudieran elegir al presidente de la comisión y al resto de las autoridades: la llave para poder ponerla en marcha.
El oficialismo propuso como presidente al jefe del bloque libertario, Gabriel Bornoroni, y la oposición propuso a la peronista massista de Unión por la Patria, Sabrina Selva. Votaron y cada uno recibió 14 votos. Justamente como no hay presidente designado nadie puede desempatar.
«Sabíamos que íbamos al empate. En la previa hablamos con todos, porque es lo que corresponde, a sabiendas de que es una pérdida de tiempo. Te hacen el canto de sirena, amenazan con rebelarse, pero aunque estén enojados con el Gobierno juegan para ellos», asegura un diputado miembro de la comisión.
Lo cierto es que primero propusieron a una legisladora del bloque kirchnerista porque la idea era que si se aceptaba el cuarto intermedio que propuso primero Nicolás Massot se negociara en esa instancia un punto intermedio, un candidato de los bloques del centro.
Ese cuarto intermedio finalmente no se dio y la discusión irá directo al recinto. Esperan convocar a una sesión por otros temas dentro de tres semanas.
La oposición está firme en que de ninguna manera aceptará que la comisión sea presidida por alguien que no votó la creación de la comisión. «Sería un contrasentido que dirija la investigación alguien que no estuvo de acuerdo con investigar«, sentenció, con lógica, Carolina Gaillard.
Nombres en danza
Así las cosas, sacando al kirchnerismo y a la izquierda quedan tres bloques del frente opositor: Encuentro Federal -que conduce Miguel Angel Pichetto-, la Coalición Cívica, y la bancada del radicalismo díscolo, Democracia para Siempre.
De ahí ahí se barajan el nombre de la radical del sector de Evolución, Danya Tavela, el «lilito» Maximiliano Ferraro y el cordobés ex PRO Oscar Agost Carreño, quien también es clave en el armado de la estrategia de la comisión.
No hay problemas de cartel entre ellos, de hecho algunos prefieren no agarrar la batuta pero coinciden en que están dispuestos a aceptar si son la prenda de unidad necesaria.
Están confiados porque el proyecto para crear la comisión investigadora se aprobó a principio de mes con 128 votos afirmativos, 93 negativos y 7 abstenciones. Sin embargo, no será fácil.
El oficialismo y sus aliados también juegan y buscarán bloquear la movida. Para empezar aseguran que la comisión ya quedó constituida y que lo que falta es definir a las autoridades. Que tiene que ser Martín Menem el que cite con nueva fecha a la comisión para que se ponga de acuerdo y elija a su presidente. «Si llevan la votación de elección de un presidente de comisión al recinto le están sacando a Menem facultades», advierte una legisladora clave del sector del oficialismo.
Todo indica que primará la lógica del que consiga más votos. «El cuerpo es el mejor interprete de su propio reglamento» sentencian en la oposición.
Van a esperar para llevar este tema al recinto a que se conforme una sesión con más proyectos. El miércoles se dictaminaron proyecto que declaran la emergencia en discapacidad y está pendiente el dictamen de la comisión de previsión sobre un nuevo sistema que reemplace a la moratoria que el Gobierno dejó sin efecto. Con esos dos platos fuertes podrían convocar a una sesión y colar la definición de la comisión $LIBRA. Estiman que habrá que esperar al menos tres semanas.