La Secretaría de Trabajo dictó en las últimas horas la conciliación obligatoria en el conflicto que lleva adelante el gremio La Fraternidad, luego de que durante la jornada fracasaran dos reuniones convocadas por el Gobierno a raíz del reclamo de la organización de maquinistas de trenes para revertir el mal estado de la infraestructura ferroviaria.
En ese marco, la cartera que dirige Julio Cordero, bajo la órbita del Ministerio de Capital Humano, intimó al sindicato de Omar Maturano a levantar la protesta que pusieron en marcha en estos últimos dos días y que consistió en hacer circular los trenes a 30 kilómetros por hora en casi todas las líneas urbanas, afectando a los usuarios que tardaron el doble de tiempo para llegar a sus destinos comparado con un día habitual.
Por su parte, La Fraternidad desafiaba la medida de Trabajo, ya que tras el fracaso de las reuniones deslizó que mantendrán en los próximos días la circulación lenta de las formaciones, al considerar que eso no es una medida de fuerza.
El Gobierno y La Fraternidad: reunión y falta de acuerdo
Representantes de la cartera laboral mantuvieron con representantes del gremio y de las empresas Operadora Ferroviaria S.A, Metrovías S.A y Ferrovías S.A Concesionaria una reunión por la mañana y otra a la tarde, pero no hubo acuerdo.
«Ante lo expuesto por las empresas de Trenes Argentinos sobre la inversión en obras y acciones prioritarias y urgentes que contempla su plan de ejecución, el titular del sindicato de trenes La Fraternidad, Omar Maturano, decidió retirarse de la mesa y cortar la negociación de forma intempestiva, abandonando toda posibilidad de diálogo y entendimiento», sostuvo Trabajo en un comunicado.





En ese marco, intimó al sindicato «a dejar sin efecto las medidas de acción directa que venían llevando adelante y que afectaron la vida de más un millón de usuarios, como así también cualquier otra toda medida de que tuvieran previsto implementar».
«El Estado Nacional tiene el deber de garantizar la continuidad de los servicios esenciales para sus ciudadanos y resguardar el interés público, sin desatender los derechos laborales ni los mecanismos de negociación colectiva», finalizó el comunicado.
Un poco de contexto
La tensión se da en un contexto particular: los maquinistas ya no tienen cuotas pendientes por cobrar de su última paritaria, que incluyó un retroactivo y bonos de hasta 40.000 pesos, lo que alimenta las especulaciones sobre el inicio de un nuevo reclamo salarial.
«Para Trenes Argentinos y SOFSA, que dicen que la medida es por paritarias, dejo unas carpetas denunciando el pésimo estado en que se encuentran los trenes y la infraestructura ferroviaria», sostuvo en la red social X Sebastián Maturano, hijo de Omar, quien participó de las reuniones.