Probablemente, nunca le ofrezcan 20 millones de dólares por tener un hijo, como lo hizo Madonna con su padre, Dennis Rodman, ni tendrá sus relaciones explosivas. Pero el primer romance público de Trinity Rodman sí que hizo ruido. Es que, la hija futbolista de la leyenda de la NBA acaba de oficializar su noviazgo con Ben Shelton, una de las joyas de la Next Gen del ATP Tour.
Trinity Rodman no es sólo la «hija de…». La chica de 22 años es una verdadera estrella del deporte estadounidense. Tanto, que a los 19 años firmó el contrato más importante de la historia de la NWSL por 1,1 millones de dólares por cuatro años con el Washington Spirit.
Había debutado una año antes, a los 18, y en su primer partido se convirtió en la futbolista más joven en marcar un gol en la NWSL. Una gran presentación.
Vale aclarar que los tiempos de ser la jugadora mejor paga de la liga femenina quedaron lejanos. Hoy, ese lugar lo ocupan la jugadora de los Chicago Red Stars, Mallory Swanson, Racheal Kundananji de Bay FC y Barbra Banda que juega en Orlando Pride. Son las tres que ocupan ese podio, con contratos con un piso de dos millones y un techo de dos millones y medio de dólares.
De todas formas Trinity cuenta con un CV más que interesantes: ganó el oro con la Selección de los Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de París 2024, año en el que también fue subcampeona con las Washington Spirit. Además, en la última temporada se metió en el top 10 de las más votadas al Balón de Oro.
Ahora, Trinity sueña con jugar en Europa. «Creo que me arrepentiría si me retirara sin haberlo hecho. Así que creo que es solo una cuestión de cuándo», dice.
Y parece estar en el lugar indicado. La dueña de su equipo, Michele Kang, es socia de John Textor, el polémico accionista de Botafogo, en el Olympique Lyon. Vale aclarar que la dueña del Spirit se quedó con las acciones del Olympique Féminin, la cama elástica que necesita Trinity para su soñado salto a Europa.
Naomi Girma con Trinity Rodman y el ritual de la medalla. Foto: ReuterEn el medio, apareció el amor.
Esta semana, Ben Shelton fue el que rompió el hielo y decidió blanquear su romance con la futbolista. El tenista se despidió de Indian Wells en cuartos de final frente a Jack Draper, quien finalmente levantaría el trofeo del Masters 1000. El lunes, quedó estampado en el número 14 del ranking ATP y el martes decidió salir de las noticias deportivas para aparecer en las del corazón y sacó a la luz su relación con Trinity.
Shelton, uno de los integrantes de la NextGen del tenis que ya cuenta más de seis millones de dólares ganados en premios (su mejor ranking fue 12, en marzo del año pasado), agregó varias imágenes en su carrete de Instagram. Y, en la última, aparece con Trinity, que le besa la mejilla y muestra la mitad de su rostro.
Fue la manera de contarle al mundo, «sí, estamos juntos».
Trinity Rodman y una complicada relación con su padre
Para Trinity, el Gusano nunca se convirtió en mariposa. Es que. la relación con su padre, Dennis Rodman, es más que distante: «Es extremadamente egoísta», declaró la chica tras ganar el oro en París 2024.
La futbolista contó que su mamá Michelle Moyer intentó salvar la relación de Rodman con sus hijos pero el caos en el que vivió el Gusano durante gran parte de su vida lo hizo imposible: «Intentamos vivir con él, pero está de fiesta 24/7, trayendo chicas raras a casa».
Denni, el excéntrico papá de Trinity.Hace un tiempo, Rodman apareció a ver a su hija en un partido por los playoffs de la NWSL, pero la joven se lo tomó a mal: «Cuando lo vi, me puse a llorar. Estaba enojada y pensé: ‘Me robaste este momento feliz, me arruinaste la cabeza otra vez'».
«Ha estado ausente en los momentos más importantes de mi vida. El no es un padre. Tal vez por sangre, pero nada más», sentenció Trinity. Y, teniendo en cuenta sus palabras, parece poco probable que Ben Shelton conozca a su suegro en la brevedad.
