Es la primera vez en la historia del país que se establece un idioma oficial a nivel nacional. La medida elimina un mandato de Bill Clinton que garantizaba asistencia en otros idiomas. La oposición demócrata advierte que la norma podría enfrentar demandas judiciales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este sábado un decreto que designa al inglés como el idioma oficial del país.
La medida, según el documento, busca “promover la unidad, cultivar una cultura compartida y asegurar la consistencia en las operaciones gubernamentales”.
Se trata de un hecho sin precedentes, ya que Estados Unidos nunca había tenido un idioma oficial a nivel federal.
El decreto también revoca una norma de la administración de Bill Clinton, que exigía a las agencias gubernamentales brindar asistencia en otros idiomas.
Si bien estas aún podrán ofrecer servicios en diversos idiomas, ya no estarán obligadas a hacerlo.
La decisión generó rechazo en la oposición demócrata, que anticipó que la medida podría enfrentar demandas judiciales.
“Vamos a examinar si lo que está haciendo realmente cumple con la ley y la Constitución”, advirtió el líder demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries.
El anuncio se produce en un contexto de creciente debate sobre la identidad cultural y las políticas migratorias en el país.