Tras más de un año de investigación, la DDI Morón detuvo a Víctor Ricardo Martín Fernández Galarza (35), acusado de participar en el homicidio de Gabriel Izzo y del violento asalto a su esposa en San Antonio de Padua. Todo fue posible gracias a una pista obtenida en un allanamiento en nuestra ciudad, donde se localizó el teléfono que utilizaba para mantenerse oculto
Víctor Ricardo Martín Fernández Galarza (36), el último prófugo de la Justicia por el atroz asesinato del empresario Gabriel Izzo y las gravísimas heridas infligidas a su esposa, Silvana Petinari, fue finalmente capturado tras un intenso tiroteo en Ituzaingó. La detención, concretada por personal de la DDI Morón, fue el resultado directo de una ardua investigación que tuvo su punto de inflexión decisivo en un allanamiento llevado a cabo en General Rodríguez.
La cacería del hombre, que era uno de los sujetos más buscados de la región Oeste, se extendió por más de un año desde el violento asalto ocurrido en junio de 2023 en San Antonio de Padua. Los investigadores le seguían los pasos de cerca, sabiendo que Fernández Galarza, de 36 años, seguía activo y cometiendo robos de alto riesgo, como entraderas.
El cerco policial comenzó a cerrarse gracias a una diligencia judicial crucial. La Justicia consiguió, después de un allanamiento realizado hace algunos días en nuestro distrito, el dato preciso de un número de teléfono que de inmediato fue puesto bajo exhaustivo análisis.
Este hallazgo en General Rodríguez constituyó el primer paso concreto de la investigación, permitiendo a los detectives rastrear los movimientos del prófugo en base a la antena del celular que utilizaba para mantenerse oculto. Una vez que se obtuvo esta información, se pudo trazar un cerrojo sobre sus desplazamientos.
«Lluvia de balas» en Ituzaingó
La oportunidad para la captura se presentó en Ituzaingó, jurisdicción de la Comisaría 4º, específicamente en la intersección de las calles Camerucci y Portugal.
Fernández Galarza se desplazaba en una camioneta Nissan Kicks, la cual tenía la patente trucha y documentación apócrifa, con numeraciones de chasis y motor adulteradas. El personal de la DDI, a cargo del comisario mayor Dante Pérez Bianchi, le dio la voz de alto, pero el sospechoso se negó a frenar y respondió al desafío disparando contra los efectivos.
Se desató una «lluvia de balas», según el relato de los vecinos. Durante la persecución, uno de los móviles policiales impactó contra la camioneta del prófugo, bloqueando su paso y forzándolo a detener su marcha sin escapatoria. El hombre, quien descendió armado y apuntó su pistola contra los agentes, resultó herido. Uno de los proyectiles impactó en su cadera.
Inmediatamente, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, Fernández Galarza fue reducido y trasladado de urgencia al Hospital del Bicentenario de Ituzaingó, donde quedó internado con custodia policial permanente. Se confirmó que la lesión no revestía gravedad.
En el vehículo en el que circulaba, los investigadores de Policía Científica secuestraron elementos que confirmaron sus actividades delictivas. Hallaron una pistola Bersa Thunder calibre 380 con 14 municiones, además de guantes, un pasamontañas y precintos plásticos, un elemento utilizado habitualmente para atar a las víctimas de entraderas.
El crimen del empresario Izzo
La tragedia golpeó en junio de 2023 a una familia histórica del barrio de San Antonio de Padua. Gabriel Izzo, de 60 años, esposo de Silvana Petinari, hija del reconocido empresario y fundador de una fábrica de acoplados para camiones, murió cuando delincuentes entraron a robar en su casa; ella resultó herida de gravedad, pero sobrevivió.
Cerca de las 4 de la mañana del viernes 9 de junio, el matrimonio (foto) dormía en su domicilio ubicado en Italia 1077 de esa ciudad y fue sorprendido por cuatro hombres que habían forzado la persiana del ventanal que da a la calle, roto el cristal e ingresado con intenciones de robo.
La pareja fue reducida con golpes y puntazos. Luego, les colocaron precintos en sus muñecas y se dispusieron a tomar los elementos de valor de la casa.
No obstante, Izzo pudo romper el precinto, agarró dos armas, un revólver y una Bersa, y se enfrentó con los delincuentes. El hombre fue alcanzado por al menos cuatro proyectiles y murió en el lugar a raíz de las lesiones de bala y también de arma blanca que los delincuentes le provocaron, mientras que su esposa fue apuñalada y golpeada. Recibió el alta el 27 de junio.
Días después del crimen fue detenido Rodríguez Sierra, dueño del Gol en el que huyeron los ladrones, y también fueron apresados su hijo y un joven de 18 años, quienes fueron liberados. Es que el auto, que quedó filmado por cámaras de seguridad municipales, fue hallado precisamente frente al local comercial perteneciente a Rodríguez Sierra. Sin embargo, el dueño del vehículo siempre dijo que él no manejaba ese auto, sino que era utilizado por sus empleados de sus comercios.
El 19 de junio de 2023, los investigadores identificaron como sospechoso del crimen a Fernández Galarza. Se sospecha que se trata del delincuente que habría sido alcanzado por uno de los disparos que hizo la víctima en el intento de defensa.
El año pasado, la causa fue elevada a juicio y en el banquillo están los cómplices de Fernández Galarza que fueron detenidos.