Una oportunidad para disfrutar de parte de la obra de “Chingolo” Casalla.
Arte que remite a la Patagonia profunda (fotos: Facundo Pardo).
El Museo de la Patagonia ofrece un extra para el visitante que por estos días se encuentre en la ciudad, como así también para el residente que desee redescubrir el porqué de la merecida fama de Carlos “Chingolo” Casalla.
Incluso, puede ser una manera de que las nuevas generaciones vean de cerca obras de un artista fundamental para la región.
Todo viene a cuenta de que en la sala Girgenti abrió la muestra De Chingolo Casalla para el museo, donde, principalmente, se puede disfrutar de piezas que fueron encargadas por la institución a mediados de la década del ochenta del siglo pasado.
Las obras sirven como testimonio del profundo vínculo entre Casalla y el patrimonio cultural de la región.
Los rostros perfilados por Chingolo «miran» fijo a quien se para frente a ellos.
De tal forma, en las paredes de la sala Girgenti aparecen varios rostros de caciques, como Valentín Sayhueque, Modesto Inacayal y Foyel, entre otros. También hay escenas campestres e incluso una serigrafía de Cabo Savino, personaje emblemático de Chingolo.
Más allá de esa serigrafía, y de dibujos a lápiz con retratos de un paisano y de Valentín Sayhueque, la técnica predominante es acrílico sobre hardboard.
En la exhibición, también hay ejemplares del Martín Fierro ilustrado y de trabajos sobre figuras históricas.
Ejemplares dedicados a figuras y episodios históricos.
Cabe destacar que Carlos “Chingolo” Casalla, quien falleció en 2017, fue un multifacético artista y maestro que abarcó la pintura, la escultura, el grabado y la ilustración.
Su estilo se caracterizó por la representación de paisajes patagónicos, escenas costumbristas y la fauna local.
Además, siempre reflejó respeto por la identidad y la historia de la zona.
Una oportunidad para disfrutar de la obra de Chingolo.
En lo que hace puntualmente a Bariloche, donde residió gran parte de su vida, debe destacarse que fue una figura clave en la escena cultural de la ciudad.
Sus obras tienen el doble valor de exhibir una gran técnica y saber mostrar la esencia patagónica.
Rincón de arte.