A casi un mes del fallecimiento de Alejandra “Locomotora” Oliveras —quien perdió la vida el 28 de julio tras sufrir un ACV isquémico—, su hijo Alejandro se animó a romper el silencio y se emocionó al recordar el sueño que su madre estaba comenzando a cumplir. Lo hizo durante una videollamada en el programa A la tarde (América TV), donde dialogó con Karina Mazzocco sobre su participación en la serie En el barro, que se estrenó en Netflix recientemente.
La conductora destacó la cantidad de mensajes que aparecieron en redes sociales tras su fallecimiento y recordó que, en el rodaje de este spin-off de El Marginal, era ella quien motivaba a sus compañeras, las hacía entrenar y compartía charlas inspiradoras.

Alejandro fue consultado sobre cómo vivió el estreno de la serie de Netflix, donde su madre debutó como actriz interpretando a una interna de la cárcel. “Es un poco raro verla ahí, porque no es un contexto donde ella se movía. Pero alucinante. Me encanta la serie, me encanta cómo se desarrolla ella. Sigue siendo fiel a lo que es. Por ejemplo, si se ponen a ver un poco el personaje, ella no fuma, no toma, no hace ninguna escena media rara así, tipo sexual”, contó.
Sobre el proceso de duelo, Alejandro se mostró conmovido: “Es un proceso largo, uno no supera así nomás este tipo de cosas. Pero es muy impactante verla en la serie. Me hubiera gustado que se vea, porque agradó mucho su personaje y su forma de actuar, siendo la primera vez que se la puede ver en pantalla”.
Cuando le preguntaron cómo había recibido su madre la propuesta de actuar, reveló que la experiencia la había llenado de entusiasmo: “Yo trabajaba con ella y estaba al tanto de todos sus proyectos. En este en particular estaba muy emocionada. Nunca estuvo nerviosa, pero sí emocionada. Ella quería incursionar en este mundo de las series y las películas, porque uno de sus sueños era que se haga la historia de su vida. Y fue como un pie para que la conozcan, hacerse más conocida en ese ámbito y decir: ‘Bueno, después vengo con esta propuesta’”.
Consultado sobre quién podría interpretarla en una eventual biopic, Alejandro reconoció que sería difícil encontrar a alguien que lograra captar no solo el parecido físico sino también la fuerza de personalidad que transmitía su madre.
Finalmente, se refirió al legado que dejó “Locomotora” y al cariño que sigue recibiendo de la gente: “Yo estuve muy conectado con ella, trabajábamos todo el tiempo y vivíamos prácticamente en el mismo lugar. Aún hoy me llegan mensajes de personas que me dicen que la extrañan mucho, que les hacen falta sus videos motivacionales de los domingos. Les decía que salgan del sillón, que respiren un poquito, que se tiren un pedo, como decía ella. Ese tipo de cosas resuenan mucho en mí. Yo, de mi parte, estoy haciendo un trabajito de día a día, con un poquito de fuerza, con un poquito de bajón, pero nunca bajando los brazos”.