Celeste Magalí Gónzalez Guerrero, detenida por el triple crimen de Florencio Varela, solicitó colaborar con la Justicia Federal como “arrepentida” el **26 de octubre de 2025”, aportando datos sobre la estructura narco implicada y pidiendo protección por su seguridad. La causa sigue abierta con nueve detenidos y varios prófugos.
Celeste Magalí Gónzalez Guerrero, la mujer que alquilaba la casa donde ocurrió el triple crimen de Florencio Varela, declaró ante el fiscal Adrián Arribas y pidió convertirse en colaboradora de la Justicia Federal. Según su testimonio, teme por su vida tras señalar a nuevos sospechosos vinculados con la banda narco “Los pulpos”.
“Una vez que se materialice la intervención del fuero Federal, deseo que se tenga en cuenta la colaboración evidenciada en la presente investigación, a los fines de poder ser incluida en la figura de arrepentido”, expresó Guerrero durante su declaración.
Solicitud de traslado y protección
La detenida también pidió ser trasladada a un penal federal, ante el temor de represalias dentro del Servicio Penitenciario Bonaerense, mientras la causa se traspasa al fuero federal con asiento en Morón por su vinculación con el narcotráfico.
Estructura narco y nuevos implicados
En su ampliación de declaración, Guerrero detalló la organización de la banda. Señaló a Joseph Freyser Cubas Zavaleta, alias “señor J” o “papá”, como líder de la red. Según su testimonio, “papá” recibía la droga y la enviaba a Julio Sotacuro para su distribución, mientras que otro miembro, llamado “abuelo”, se encargaba de la producción y transporte internacional.
Guerrero describió además episodios de violencia extrema y torturas, incluyendo castigos grabados y enviados a otros miembros de la banda. Entre los presuntos autores intelectuales del crimen, Zavaleta, de 31 años y nacionalidad peruana, permanece detenido en la División Caballería de la Policía Federal Argentina en Palermo, a la espera de su extradición a Perú.
Investigación en curso
El fiscal Arribas solicitó que el caso pase al fuero federal, considerando que no se trata de un homicidio aislado, sino de un crimen planificado por una organización narco con jerarquías y roles definidos. Actualmente hay nueve detenidos en Argentina, uno en Perú y al menos tres prófugos con pedido de captura. La Justicia deberá resolver en los próximos días si acepta el traspaso de la causa y el reconocimiento de Guerrero como testigo clave bajo la figura de arrepentida.





