Un domicilio familiar en el barrio barcelonés del Clot ha sido el escenario de un inquietante descubrimiento: una madre y una hija, de 80 y 50 años aproximadamente, según fuentes de los Mossos d’Esquadra, han aparecido muertas en la vivienda sin que se hayan detectado a simple vista signos de violencia o criminalidad.
Las mismas fuentes señalan que los cuerpos se encontraban en avanzado estado de descomposición, lo que hace suponer que los fallecimientos se produjeron hace ya varios días. La autopsia determinará la cronología y la etiología de la muerte. Hay que tener en cuenta que el efecto de los grandes calores registrados en los días pasados en la capital catalana han podido tener un notable impacto en la degradación de los cadáveres.
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El macabro descubrimiento se llevó a cabo el pasado 4 de julio. A partir de ese momento, y según informa BTV, el juzgado de instrucción número 20 de Barcelona se hizo responsable de las investigaciones.
Familiares de las dos fallecidas presenciaron junto a la comisión judicial el levantamiento de los cadáveres. Mientras no se conozcan los resultados de la autopsia, es muy delicado para los investigadores apuntar un posible móvil que podría pasar desde algún tipo de accidente a una circunstancia deliberada.
