El cuerpo de una mujer encontrado dentro de su casa fue mutilado parcialmente por sus dos perros salchicha, Frankie y Millie, según una investigación policial.
Jemma Hart, de 45 años,solía pasear sus perros por el barrio en forma habitual hasta que un día desapareció. Los vecinos, preocupados, hicieron la denuncia policial.
La policía llegó a la casa de la mujer en Swindon, Inglaterra, y se encontró con una escena espantosa: los perros, según se informa, habían comenzado a comer partes de la mujer en un aparente intento de sobrevivir después de su muerte.
El diario británico The Sun informa que en la investigación realizada este mes se escucharon comentarios de lugareños que solían cruzarse con Jemma paseando a sus perros y que «siempre podían oír a los perros en su jardín trasero».
Se preocuparon cuando un mensaje de texto dirigido a Jemma quedó sin abrir y se escuchó a un perro gemir. En la investigación sobre la muerte de Jemma, su hijo describió su amor por los animales.
Una autopsia confirmó que Jemma se suicidó. Además, presentaba lesiones corporales causadas por sus perros tras su muerte.El joven declaró en la investigación que «ella había tenido perros en el pasado, pero en 2022 adquirió un perro salchicha llamado Frankie y un año después otro llamado Millie». «Los perros salchicha eran su vida»..
El forense Ian Singleton dijo: “El 29 de enero, los vecinos de Jemma se comunicaron con la policía de Wiltshire porque les preocupaba que no la hubieran visto desde Navidad. Los oficiales fueron a su casa y la encontraron muerta en la sala de estar. Uno de sus perros también fue encontrado muerto en el lugar y el otro se encontraba en estado deplorable”.
La mujer había desaparecido hace un mes de los lugares que solía frecuentar.Un oficial de policía confirmó que el cuerpo de la mujer había sido devorado después de su muerte. Un informe policial indicó que la señora Hart se había suicidado. Las mascotas habían quedado encerradas más de un mes en la vivienda, sin alimentos. Ante esa dramática situación, los perros salchicha habrían empezado a comer el cuerpo de la mujer.
Una investigación local indicó que la mujer de 45 años enfrentaba varios problemas de salud y movilidad y esas situaciones la habían llevado a sufrir graves problemas mentales. También estaba distanciada de su familia y vivía con sus perros.
Según su hijo, a menudo se la veía paseando a sus queridas mascotas, a quienes describió como «su vida».
Cómo criar a perros agresivos
Según los especialistas, la clave para educar a los perros de razas peligrosas o agresivas es hacerlo desde que son cachorros. «Un perro se puede volver peligroso por muchas razones pero que, en la mayoría de los casos, los humanos son los principales responsables», es un frase de cabecera de expertos en la crianza de este tipo de animales.
En todo el mundo se aplican leyes regulatorias para la tenencia de animales agresivos, pero el entrenamiento desde pequeños es la clave.
Una correcta socialización del cachorro entre las 4 y 16 semanas de vida es una de los puntos vitales para evitar futuros problemas. En este período el animal entrará en contacto con todos los estímulos que formarán parte de su mundo habitual.
Es de suma importancia la forma en la que el animal se cría y los límites que se establecen en su etapa de socialización, es decir, cuando son cachorros. Si estos no fueron establecidos en esa etapa, existe una alta probabilidad que tenga problemas de conducta cuando crezca.
Es importante consultar siempre al veterinario de confianza y si es necesario, hay que recurrir a un etólogo, especialista en conducta animal. Un inconveniente tomado a tiempo generalmente es manejable. Hay dueños que no toman conciencia que tienen un perro agresivo y cuando el animal se convierte en un macho adulto dominante termina siendo un problema.
Si los dueños lo pueden manejar mediante un etólogo y siguen lo que ese especialista indique, quizás el animal tome el lugar que debe. Si el animal empieza a mostrar su dominancia mediante un ladrido, un pequeño mordiscón, asustando al propietario y éste acata esa orden, el perro entiende que ganó el lugar de macho dominante. Entonces, si se lo quiere retar en ese momento el animal pelea contra quien lo retó. Por eso, hay que tratar esa cuestión desde que son cachorros
