Según datos recientes, las reservas de vuelos hacia Japón desde regiones clave de Asia cayeron hasta un 83 por ciento a raíz de la predicción catastrófica del manga «The Future I Saw» («El Futuro que Vi»), que advierte de un desastre natural para el 5 de julio de 2025.
Escrito por Ryo Tatsuki y publicado en 1999, la novela gráfica japonesa se basa en los sueños que tuvo de chica la autora y que recopilo en un diario. El manga captó la atención tras el terremoto y tsunami de Tōhoku de 2011, por la declaración «El desastre llegará en marzo de 2011» en su portada.
A la autora también se le adjudica haber predicho en su manga el ataque de las Torres Gemelas y la pandemia por covid-19. La obra ganó notoriedad, vendió 90.000 ejemplares hasta agotar sus ventas, lo que llevó a una reimpresión en 2021.

En «Yo vi el futuro – Edición completa», Tatsuki vaticinó un terremoto devastador y un enorme tsunami que golpearían Japón en julio de 2025. Según la obra, una grieta se abrirá en la frontera marina entre Japón y Filipinas, lo que producirá un tsunami con olas «tres veces más altas» que las de 2011
La industria turística de Asia se vio afectada a la luz de dicha predicción. CN Yuen, gerente general de WWPKG, una agencia de viajes con sede en Hong Kong, explicó a CNN que las reservas a Japón se redujeron a la mitad durante las vacaciones de Semana Santa y no hay expectativas que la tendencia se revierta en los próximos dos meses.
Predicciones de un manga que alteran el flujo turístico
De acuerdo con el medio estadounidense, las especulaciones asustaron a los viajeros de China continental y Hong Kong, que son la segunda y cuarta fuente de turistas de Japón, respectivamente.
El temor se extendió también a otros mercados, como Tailandia y Vietnam, con mensajes redes sociales que advierten de la predicción de Tatsuki. «La gente simplemente dice que quiere aplazar su viaje por ahora», comentó Yuen.
Bloomberg Intelligence, con datos de la firma de análisis de viajes ForwardKeys, reveló que las reservas de vuelos desde Hong Kong a Japón para finales de junio y principios de julio cayeron un 83 por ciento respecto al año anterior.

Desde abril, la tendencia ya mostraba una disminución del 50 por ciento en promedio. Aerolíneas como Greater Bay Airlines y Hong Kong Airlines redujeron frecuencias a Japón como respuesta, según informó la agencia International Press.
La Agencia Meteorológica de Japón reiteró que no hay forma científica de anticipar la fecha exacta de un sismo y advirtió que este tipo de predicciones sin fundamento deben considerarse falsedades. Aun así, la combinación de miedo, superstición y viralidad logró enfriar uno de los mejores momentos del turismo en el país.