Screenshot
La óptica coherente se consolida como una tecnología esencial para enfrentar los desafíos de conectividad y sostenibilidad en América Latina, una región donde el crecimiento exponencial del tráfico de datos exige redes más potentes y eficientes. Impulsada por la expansión de la fibra óptica, el auge de los centros de datos, la adopción masiva de servicios en la nube y el desarrollo de cables submarinos, la infraestructura digital latinoamericana vive una transformación acelerada. Capaz de transmitir hasta 1.6 Tb/s por longitud de onda, la óptica coherente permite a los operadores aumentar la capacidad de sus redes, reducir los costos operativos y optimizar el consumo energético sin necesidad de reemplazar infraestructuras existentes, algo especialmente relevante en un contexto de inversiones limitadas y alta presión por la eficiencia.
Además de mejorar el rendimiento de las redes actuales, la óptica coherente ofrece la flexibilidad necesaria para integrarse con infraestructuras metropolitanas, de larga distancia y submarinas, extendiendo la conectividad hacia zonas rurales y reforzando la resiliencia del ecosistema digital regional. Su papel resulta cada vez más crítico en aplicaciones que requieren baja latencia y alta capacidad, como la inteligencia artificial, la realidad aumentada y la computación en la nube. En un momento en que América Latina busca consolidar su posición dentro de la economía digital global, esta tecnología representa un pilar estratégico para impulsar la sostenibilidad, la innovación y la competitividad de sus telecomunicaciones. Descarga el informe completo y descubre cómo la óptica coherente está redefiniendo el futuro de la conectividad en la región.
Tu opinión es importante ¿Qué te ha parecido este contenido?
0 0