La provincia de Tucumán continúa conmocionada por la muerte de Karla Robles, una joven de 27 años que el pasado 24 de octubre se quitó la vida en circunstancias que ahora son investigadas por la Justicia como un posible caso de instigación al suicidio en contexto de violencia de género.
El hecho ya generaba conmoción por el historial de seis denuncias previas por hostigamiento que la víctima había presentado contra su exnovio, Diego Zerda, cuando un nuevo dato estremeció a la opinión pública: según seguidores de Karla, la joven habría transmitido su muerte en vivo por TikTok.

Aunque ni la familia ni el abogado que los representa confirmaron públicamente esa versión, varias usuarias que la seguían en la red social dejaron mensajes dando cuenta del horror que presenciaron.
«Lamentablemente vi el vivo… no podía entender por qué lo hizo… Fuerza a toda su familia”, escribió una joven en una de las últimas publicaciones de Karla. Ante la consulta de otra usuaria, respondió: “Fue acá en un live que transmitió ella… muy triste, muy feo fue verlo. El live lo hizo 3:40 am del 24 de octubre”. El dato circula en redes desde hace días, mientras los investigadores analizan el contenido del celular secuestrado tras la muerte.

“Le dijo que si no se quitaba la vida, iba a matar a su familia”
La familia de Karla, devastada, no duda en apuntar contra Diego Zerda, hijo de un periodista local. Según relataron, la joven había vivido meses de amenazas, violencia psicológica y control. En sus redes, la madre de Karla publicó varios mensajes en los que describió el calvario de su hija.
El abogado de la familia, Augusto Avellaneda, lo ratificó en declaraciones a Canal 10: “Recibía amenazas constantes de su expareja. La obligó a eliminar una foto y le dijo que si no se quitaba la vida, iba a matar a su mamá, a su papá y a toda su familia”.
El abogado también confirmó que desde 2022 se presentaron múltiples pruebas ante la Justicia, incluyendo mensajes, audios y videos que reflejaban el hostigamiento, pero no se logró que se dictara ninguna medida restrictiva contra el agresor. “La intervención fue inmediata recién ahora, después de que Karla tomó la drástica decisión de quitarse la vida”, señaló con amargura.

El caso quedó bajo la órbita de la Unidad Fiscal de Homicidios I, a cargo del fiscal Pedro León Gallo, que dispuso medidas urgentes. El celular de Karla fue entregado a la Justicia, al igual que otros elementos digitales que podrían confirmar el entorno de violencia.
Por estas horas, la hipótesis principal es que el suicidio fue consecuencia directa del hostigamiento sistemático por parte de Zerda, quien hasta el momento no fue detenido.
Una historia que vuelve a mostrar las fallas del sistema
Según el Registro Nacional de Femicidios de la Corte Suprema, en 2023 se reportaron 250 femicidios y al menos 26 suicidios vinculados a violencia de género, en la mayoría de los casos precedidos por denuncias que no prosperaron. Tucumán, en particular, es una de las provincias con mayores tasas de denuncias por violencia psicológica.
El suicidio de Karla, de confirmarse la transmisión en vivo, se convierte en una advertencia cruda de cómo la violencia emocional también mata, incluso cuando no deja marcas visibles.





