El entrenador de Nacional, Pedro Sarabia, se mostró un poco disgustado con el arbitraje de David Ojeda, pero especialmente con la irresponsabilidad de Hugo Iván Valdez y Carlos Espínola, quienes fueron expulsados en la derrota ante Cerro Porteño, el lunes en estadio Arsenio Erico.
«Esto lo pueden corroborar ustedes, antes del partido les dije ‘No le demos de comer a ninguno de los integrantes en el partido’, ahí sacan sus conclusiones ustedes y creo que le dimos de comer. En la charla repetí, tratemos de no entrar en el juego de ellos, porque se pueden dar situaciones que nos pueden comprometer y quedó demostrado en dos situaciones que el vivo queda en la cancha y el tonto va a la gradería», disparó el «Cabo» en conferencia de prensa.
«Para mi son irresponsabilidades porque un jugador tiene que salir por una doble amarilla o por evitar un gol, por tratar siempre de sacar provecho o porque no había otra opción y en este caso y en el partido pasado nos ha pasado lo mismo», lamentó.
Con respecto a la labor arbitral, Pedro Sarabia aclaró que el especial reclamo de parte de la «Academia» es la no sanción del supuesto penal por la mano de Gastón Giménez, que se revisó en el VAR y finalmente quedó en la nada.
«Quisiera hablar más del arbitraje, pero eso lo dije al comienzo, quiero que ustedes lo evalúen. La primera expulsión yo creo que, lo he visto, por ahí es un acercamiento de cabeza, por ahí digo para qué provocar algo que te puede sacar del partido», indicó.
«Lo que más cuestiono es que algunas faltas eran para ellos, cuando íbamos a estar atacando, otras veces tratando siempre de generar juego», agregó.
«El gesto que uno lo ve por imágenes al término del partido, creo que fue Gastón el que tocó con la mano, hace un gesto como diciendo: «¿qué hice?» Pero bueno, es lo que le trasladé al árbitro. Creo que fui muy respetuoso siempre como jugador y lo seguiré siendo como entrenador, pero las conclusiones ustedes la van a sacar. Hubiera sido un buen espectáculo si nosotros también terminábamos con 11, porque también hay un grado de irresponsabilidad, pero yo creo que con 10 no nos quedamos atrás», finalizó.
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Jorge Bava habló sobre la importancia del partido con Guaraní, que puede ser definitorio en lo que respecta a la lucha por el título.
El entrenador de Cerro Porteño entiende que es «una final anticipada» por «la poca brecha de puntos (3)» entre ambos equipos.
«Va a a ser un juego que va a marcar mucho. Ambos tenemos un fixture apretado, la liga te muestra que es todo muy apretado. Estamos con mucho entusiasmo», señaló anoche en conferencia pos victoria sobre Nacional (2-1).
«Es una presión linda que se viene, es un partido importante y casi definitorio. Son dos muy buenos equipos, por algo Guaraní está puntero», agregó.
Bava insistió que hay «presión en el buen sentido (positiva)» porque «llegar a una instancia definitoria con la posbilidad de depender de vos mismo, es muy positivo».
«Estamos con la obligación de ganar en casa y ver de otra cara el final del campeonato», sentenció.
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Juan Manuel Iturbe hizo una punzante autocrítica tras la ajustada victoria sobre Nacional.
Cerro Porteño (36) tuvo que extremar recursos para superar anoche a su rival de patio, que le puso el trámite cuesta arriba y por poco le da el golpe de gracia en la lucha por el título. Sin embargo, el equipo de Jorge Bava se repuso, lo dio vuelta y logró una victoria (2-1) crucial para seguir a tres del puntero, Guaraní (39).
En este sentido, Juan Manuel Iturbe dejó en claro que, en la presente circunstancia solo importa la victoria, y no la forma en que pueda conseguirse. «Creo que en esta instancia no importa jugar bien, o bonito como se dice. Hay que ganar los partidos, solo eso importa; nos quedan cuatro finales de verdad. Hoy en día sacar evaluaciones de si jugamos bien o jugamos mal, no importa mucho», señaló el velocista.
Iturbe reconoció que a Cerro le «cuesta demasiado» sacar los puntos porque «como equipo nos desesperamos».
«Queremos hacer el gol rápido sabiendo que el rival juega con uno menos, deberíamos de estar más tranquilos, sabiendo que jugamos con un hombre más. Y también el rival, ellos saben el potencial de ataque que tenemos y se cierran más. Necesitamos estar más tranquilos, mover la pelota», explicó.
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