En Bahía Blanca tuvieron que suspender el servicio de colectivos luego de que al menos 15 unidades de distintas líneas fueran atacadas con piedras desde la madrugada. Estaba previsto que ese transporte público funcionara con normalidad en la ciudad durante todo el jueves pese al paro general dictado por la CGT, el tercero contra el gobierno de Javier Milei. El intendente Federico Susbielles denunció que las agresiones fueron «coordinadas y en un lapso de 20 minutos».
Ante estos episodios de violencia, en los cuales los vehículos tuvieron roturas de vidrios (entre otros daños) pero no se reportaron heridos, la UTA decidió rápidamente que los choferes volvieran a las cabeceras.
«En común acuerdo con las empresas, ante la ola de daños y vandalismo en las unidades, se paran los servicios, por seguridad de los pasajeros, choferes y los colectivos«, fue el mensaje que el gremio de los colectiveros envió a los medios locales y reprodujo el diario La Nueva. La decisión se comunicó a las 8 de la mañana.
La UTA no adhirió a la huelga a nivel nacional. La primera hipótesis es que los ataques fueron responsabilidad de algún sector sindical que pretendía que los colectivos se sumaran al paro, ya que fueron casi en simultáneo y en distintos puntos de Bahía Blanca, que aún sufre las consecuencias del devastador temporal que la golpeó hace un mes.
«Nosotros habíamos hablado con la Municipalidad para que den seguridad y con los empresarios, que traten de cuidar al pasajero y a nuestros afiliados, pero se ve que no han podido porque los ataques fueron en muchos lugares y en muchos casos», remarcó el secretario local de la UTA, Guillermo Ostachini.

Las agresiones afectaron al menos a 15 micros de las empresas San Gabriel, Rastreador Fournier y Sapem Transporte, que tuvieron sobre todo roturas de parabrisas, lunetas y ventanillas.
Ostachini adelantó que el viernes el servicio de colectivos será normal en Bahía Blanca, ya que las compañías «están trabajando para arreglar los daños».
El intendente denunció que los ataques fueron «coordinados»
«Lamentable y repudiable que en un momento tan triste y complejo de la ciudad vivamos hechos de violencia como los registrados esta mañana contra colectivos del servicio de transporte público de Bahía Blanca. Los hechos de vandalismo fueron perpetrados de manera coordinada y en un lapso de 20 minutos, antes de la salida del sol», afirmó el intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, en su cuenta de la red social X.
El jefe comunal puso a disposición de la Justicia los registros de las cámaras de seguridad de la Municipalidad para colaborar con la investigación.
Además, explicó que le pidió al subsecretario de Transporte y Movilidad de Bahía Blanca, Fabián Lliteras, que realice una denuncia penal «por daños a la flota municipal».
«El derecho constitucional a manifestarse debe respetar la paz social y el derecho a circular y trabajar de quien decide hacerlo, y en ese sentido rescato el comunicado que la CGT local ha emitido al respecto», sostuvo Susbielles.
Lamentable y repudiable que en un momento tan triste y complejo de la ciudad vivamos hechos de violencia como los registrados esta mañana contra colectivos del servicio de transporte público de Bahía Blanca.
Los hechos de vandalismo fueron perpetrados de manera coordinada y en…
— Federico Susbielles (@fsusbielles) April 10, 2025
Cómo fueron los ataques
«Tiraron piedras y elementos de rodamiento. Se escuchaban los impactos, pero no se sabía de quién, de dónde (venían) ni cómo», contó Luis, un integrante del área de Tráfico de Rastreador Fournier en diálogo con La Nueva.
Esa línea tuvo al menos seis unidades con impactos de piedras. «La primera fue la 507, alrededor de 5.50, en Villa Harding Green. El chofer estaba estacionado y avisó que le habían roto dos vidrios. Después, entre las 6 y las 7 de la mañana, una unidad de la 505 que estaba estacionada en el playón fue encontrada con daños similares», añadió el trabajador.

Además, detalló que un colectivo de la línea 500 y otro de la 505 circulaban con pasajeros en el momento de las pedradas, pero aclaró que no hubo heridos.
«Venimos de trabajar como podemos tras el temporal. Todavía tenemos unidades fuera de servicio y ahora nos pasa esto», cuestionó.
Por su parte Eduardo, un chofer de la empresa San Gabriel, relató: «A mí me apedrearon el colectivo de la 504 a las 5.30 de la mañana, en Avenente y De Solier. Era un ladrillazo. Estaba por salir y me reventaron la luneta. Di dos vueltas, pero tiraron piedras a otras unidades y nos vinimos a la cabecera».

La CGT local intenta despegarse
Poco después de que se frenara el servicio de colectivos, la seccional local de la CGT intentó despegarse de los ataques mediante un comunicado. Los consideró «hechos vandálicos».
«Habiendo tomado conocimiento de hechos vandálicos contra colectivos que circulaban en la madrugada, es que queremos repudiar este y cualquier hecho de violencia. Además esperamos que la Justicia actúe encontrando a los responsables de haber generado esos daños y de poner en juego la integridad física de choferes y pasajeros (todos trabajadores) que circulaban en esas unidades», expresó la central gremial.
«La jornada de protesta, que entre otras cosas es contra la violencia que ejerce el gobierno sobre la protesta social, no puede incluir ningún hecho de violencia», agregó.

También en el Gran Buenos Aires
Durante las primeras horas de la medida de fuerza, un episodio similar se registró en el Conurbano, aunque en este caso resultó aislado.
Un colectivo de la línea 269 fue apedreado en la esquina de Leloir y Udaondo, en Parque Leloir.
Para evitar este tipo de incidentes, en la Ciudad y el GBA muchos choferes decidieron tomar servicios a partir de las 5.
LP