
El presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, aseguró este domingo que el acuerdo con la Unión Europea marcará “un ”antes y un después» tanto para su país como para el Mercosur y que el tema es un asunto prioritario para su gobierno en Uruguay.
“Esta es para Uruguay una de las prioridades en política exterior. Y marca un hito en nuestras relaciones internacionales, no solo por las oportunidades de comercio y de inversión, sino también por el contexto geopolítico en el que vivimos y la comunidad de valores y principios que unen a Europa y a los países del Mercosur”, dijo Orsi en una rueda de prensa conjunta con el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier.
Orsi enfatizó el compromiso de su gestión para impulsar en el Parlamento la pronta ratificación de este acuerdo y aseguró que cuenta con que “los partidos democráticos de nuestro país acompañarán esto”.
El presidente de Uruguay, recién juramentado este fin de semana, mantuvo este domingo una apretada agenda con varias reuniones de líderes internacional que asistieron ayer a su investidura.

Por su parte, el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, espera que las relaciones entre ambas naciones se puedan estrechar a propósito de los cambios en Montevideo.
“Estoy seguro de que profundizaremos nuestras relaciones económicas. El acuerdo de asociación entre la Unión Europea y el Mercosur constituye un hito económico y geopolítico importante. Alemania aboga por la pronta entrada en vigor del acuerdo, también entre los estados miembros de la Unión Europea que aún están titubeando y desde aquí, en Montevideo, donde se firmó el acuerdo a finales del año pasado, quisiera hacer hincapié en que queremos y necesitamos el acuerdo con el Mercosur. Con el acuerdo se creará una de las zonas de libre comercio más grandes del mundo, con más de 715 millones de habitantes”, enfatizó.
Yamandú Orsi, juró el sábado el cargo ante la Asamblea General bajo la aspiración a revertir los “problemas urgentes que padecen sectores importantes del pueblo uruguayo” a lo largo de los cinco años en que estará al frente de la nación sudamericana.
“Hoy no comienza un tiempo de refundación, sino uno de nuevas propuestas y de construcción permanente”, dijo Orsi en un discurso tras su investidura.

La asunción de Orsi, de 57 años, marca el regreso al poder del Frente Amplio, una coalición de centroizquierda que incluye a moderados, comunistas y sindicalistas de línea dura, tras cinco años de ausencia durante el gobierno del saliente presidente de centroderecha Luis Lacalle Pou.
Acompañado de su compañera de fórmula, Carolina Cosse, el ahora mandatario llegó al Palacio Legislativo de Montevideo a las 14.00 hora local (17.00 GMT) bajo aplausos de la multitud que se concentraba en las afueras del recinto. Poco después, juró el cargo ante el renovado Congreso, tres meses después de su victoria presidencial en una elección sin drama ampliamente elogiada como un antídoto a la polarización política que afecta a los vecinos Argentina y Brasil, entre muchos otros países del mundo.
Tras ser investido, Orsi se dirigió en coche para un cortejo y se desplazó hacia la Plaza de la Independencia, en medio de gritos y saludos de una alegre multitud con banderas, donde fue recibido para el saliente mandatario para realizar el traspaso de la banda presidencial. En este acto de clausura, igualmente nominó a su gabinete de ministros.
(Con información de EFE)