San Miguel do Oeste y otras ciudades brasileñas fueron golpeadas por un frente de alta intensidad. Se registraron ráfagas superiores a los 160 km/h, árboles caídos y familias evacuadas.
jueves 22 de mayo de 2025 | 21:25hs.
Una violenta tormenta de características inusuales provocó importantes destrozos en el oeste del estado brasileño de Santa Catarina, a escasos kilómetros de la frontera con Misiones. El fenómeno, asociado a una supercélula, generó ráfagas que superaron los 160 km/h, caída de granizo, microexplosiones e intensas lluvias, afectando a varias localidades durante la madrugada del jueves.
El epicentro fue el municipio de San Miguel do Oeste, donde la tormenta se desató entre las 2 y las 3 de la madrugada. A medida que el sistema avanzaba por la región limítrofe con Argentina, incrementó su potencia y provocó daños en Belmonte, Bandeirante, Descanso y otras ciudades del área.
La Defensa Civil de Santa Catarina confirmó la presencia de microexplosiones —descargas de viento descendente extremadamente violentas— como uno de los principales elementos destructivos. En cuestión de minutos, las ráfagas arrancaron techos, derribaron árboles y dañaron tanto la red eléctrica como edificaciones públicas.
Entre las consecuencias más severas se registraron:
-Daños en alrededor de 100 viviendas en San Miguel do Oeste.
-Cuatro personas rescatadas por anegamientos.
-Más de 30 pedidos de emergencia por obstrucción de caminos y caídas de árboles.
-Pérdidas en infraestructura educativa y asistencial.
Cinco escuelas suspendieron actividades tras quedar sin electricidad o con estructuras comprometidas, dejando a unos 900 alumnos sin clases. Además, el viento arrancó el techo del Departamento de Asistencia Social, que terminó colapsando sobre un gimnasio contiguo.
El Cuerpo de Bomberos Militares trabajó intensamente desde las 2.30 hasta pasadas las 7.00 para atender las múltiples emergencias. Un total de 22 agentes, con el apoyo de cinco móviles, participaron en el operativo de asistencia a los damnificados.
Las autoridades brasileñas continúan con el relevamiento de daños y asistencia a los afectados, mientras se mantiene la alerta meteorológica en la región. La tormenta, que ocurrió a menos de 20 kilómetros de Misiones, encendió las alarmas por la intensidad de sus vientos y su cercanía con territorio argentino.