Supercélula causó estragos en Brasil. Una violenta tormenta azotó en la madrugada de este jueves al municipio de San Miguel do Oeste, en el estado brasileño de Santa Catarina, a menos de 20 kilómetros de la frontera con Misiones, dejando a su paso una estela de destrucción. El fenómeno sorprendió a los habitantes mientras dormían y generó importantes daños materiales en viviendas, escuelas y edificios públicos.
Entre las 2.00 y las 3.00 de la madrugada, una supercélula -tormenta severa de gran intensidad- se formó en la región fronteriza con Argentina y, al avanzar hacia territorio brasileño, ganó fuerza y provocó estragos en diversos municipios, entre ellos Belmonte, Bandeirante, Descanso, Barra Bonita y el propio San Miguel do Oeste. Este tipo de tormenta es conocido por su potencial destructivo, incluyendo granizo de gran tamaño y tornados.
Según informó la Dirección de Defensa Civil, el fenómeno incluyó microexplosiones y la formación de tornados, generados por la acción de un frente frío que ingresó a la región, con vientos que superaron los 160 kilómetros por hora. La intensidad de los vientos y las lluvias obligaron a muchas familias a evacuar sus hogares en plena noche.
Caos meteorológico y daños masivos
La tormenta, que se presentó también con lluvias intensas y granizo de gran tamaño, ocasionó la caída de árboles, voladuras de techos, derrumbe de estructuras, anegamientos y severos daños a la red eléctrica. Muchos barrios quedaron sin suministro de energía y agua potable, complicando aún más la situación de los damnificados.
De acuerdo con Defensa Civil Municipal, el fenómeno principal fue causado por una microexplosión, un evento meteorológico extremadamente violento que se manifiesta con fuertes ráfagas descendentes de viento. Este tipo de fenómeno puede tener efectos comparables a los de un tornado, pero en un área más localizada, lo que explicaría la destrucción concentrada en ciertos puntos de la ciudad.
El Departamento de Bomberos Militares de Santa Catarina (CBMSC) desplegó un operativo de emergencia entre las 2.35 y las 7.45 de la mañana para atender las múltiples consecuencias del temporal. Las tareas de rescate, asistencia y remoción de escombros se extendieron durante toda la jornada.
Escuelas sin clases y familias afectadas
En total, se realizaron cuatro rescates de personas atrapadas por las inundaciones, se entregaron 39 lonas para cubrir viviendas con techos dañados y se respondieron a 14 llamados por árboles caídos y caminos obstruidos. Participaron en los operativos 22 bomberos, tanto militares como comunitarios, con el apoyo de cinco vehículos. El coordinador municipal de Defensa Civil, Wuillian Lanza, informó que cerca de 100 viviendas sufrieron daños en el área urbana del municipio.
Además, se reportaron perjuicios en edificios públicos. El techo del Departamento Municipal de Asistencia Social fue completamente arrancado por el viento y terminó sobre el gimnasio contiguo, comprometiendo parte de su estructura. Las autoridades locales temen que el daño estructural en algunas instalaciones públicas sea más grave de lo que aparenta.
En el ámbito educativo, cinco centros escolares se vieron obligados a suspender las clases debido a daños estructurales o interrupciones en el suministro eléctrico, lo que afectó directamente a más de 900 estudiantes. El gobierno local trabaja en medidas de contingencia para retomar las clases lo antes posible. (Con información de Misiones on line)
