El presidente Javier Milei intervino públicamente en el conflicto entre Estudiantes de La Plata y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), generando un vuelco político en una disputa deportiva de alto voltaje. En un posteo en X (antes Twitter), Milei manifestó su respaldo a Juan Sebastián Verón y criticó con dureza el arbitraje: “Honor a la Escuela de Don Osvaldo. Fin”, escribió junto a una imagen de la camiseta de Estudiantes y un león.
Por la noche, el mandatario reafirmó su postura al republicar una publicación del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, que analiza estadísticamente el trato arbitral hacia Barracas Central. Según ese estudio, desde que Claudio “Chiqui” Tapia asumió como presidente de la AFA, el club del sur de la Ciudad de Buenos Aires habría recibido un 8 % más de fallos favorables y un 28 % menos de fallos desfavorables, lo que podría traducirse en una ventaja de entre 9 y 18 puntos por torneo.
El origen de la tensión fue el controvertido pasillo que Estudiantes le hizo a Rosario Central: los jugadores del Pincha lo hicieron dándose vuelta, como símbolo de protesta contra la consagración de Central. Además, se abrió un expediente disciplinario por parte del Tribunal de la AFA, que pidió descargos tanto a Verón como al capitán del equipo, Santiago Núñez, y al plantel de Estudiantes.
Milei ya había mostrado afinidad con Verón y con Estudiantes en anteriores ocasiones. Su reciente intervención aporta un fuerte condimento político al conflicto futbolístico, confluyendo con críticas históricas al modelo de la AFA bajo Tapia.

