En diálogo con Canal E, el economista Isaac Rudnik analizó las condiciones políticas y económicas que sostienen la estabilidad cambiaria actual, más allá de las afirmaciones oficiales.
Una estabilidad sostenida por factores externos
“El Gobierno insiste con lo mismo, el mercado evidentemente le cree”, afirmó el entrevistado al referirse a la negativa oficial de una eventual devaluación. Según explicó, hay elementos estructurales que inciden más allá de la voluntad del Ejecutivo.
“Hoy la estabilidad que hay en el marco internacional respecto a la evaluación del modelo argentino se basa en una evaluación política”, remarcó Rudnik. En su análisis, el economista aseguró que las decisiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el apoyo del Gobierno de Estados Unidos han sido claves para mantener la estabilidad del dólar y contener la inflación.
El peso del respaldo político internacional
Rudnik recordó que, aunque el Gobierno había descartado una devaluación a principios de año, finalmente necesitó apoyo externo. “El Gobierno tuvo que recurrir a los recursos que transfirió el Fondo”, señaló, subrayando que la transferencia no fue solo técnica sino política, impulsada directamente por Washington.
“No todo pasa por la decisión del Gobierno argentino”, insistió el especialista, quien advirtió que la continuidad del modelo económico dependerá de mantener el consenso político interno, pero también del compromiso de los actores internacionales.
Un modelo con cifras mixtas
El economista analizó también los últimos indicadores económicos difundidos por el INDEC. En particular, el crecimiento interanual del 5,6% en marzo, que se compara con una baja del 8,4% en el mismo mes de 2024. “Esto que así podría ser positivo, en alguna medida lo es, pero estamos hablando de una comparación interanual sobre una baja muy pronunciada”, aclaró.
Además, la variación mensual entre febrero y marzo mostró un retroceso del 1,8%, revelando cierta volatilidad en la recuperación económica.
Sectores dinámicos vs. sectores en crisis
Rudnik diferenció entre los sectores que empujan el crecimiento y aquellos que siguen en retracción. “Los sectores que crecen efectivamente por encima del promedio son los que están orientados a la exportación”, como la agricultura (6%), la pesca (7%) y la minería (5,7%).
Por otro lado, sectores vinculados al consumo interno como el de electricidad, gas y agua mostraron una nueva caída del 4,3%, que se suma a una baja del 8% en el mismo período del año anterior.
Baja utilización de la capacidad instalada
El economista alertó sobre la subutilización de la capacidad instalada, que en marzo fue del 54,4%. “Es una utilización bastante baja”, señaló. A excepción de la refinería de petróleo (76%) y alimentos (57%), otros sectores clave como la industria automotriz (48,9%) y textiles (41%) operan por debajo de sus posibilidades.
“Esto muestra las consecuencias de la apertura económica”, concluyó el economista, señalando que el ingreso de productos importados y la caída del consumo están afectando fuertemente a las industrias locales.